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Marruecos
¡¡¡¡ MOTOSALIDOS SE VA A MARRUECOS !!!!
Uno de nuestros viajes más especiales, Marruecos es una experiencia mágica, un despertar de los sentidos, festival de colores, olores, sabores… que al menos todo viajero en moto debería vivir una vez en la vida. Te adentras en sus idílicos paisajes, conociendo la cara más auténtica de este impresionante país lleno de contrastes.
Nuestro viaje comenzó en Tánger, donde se reunió todo el grupo para empezar a vivir esta inolvidable experiencia de quince días con amaneceres limpios y atardeceres rosas infinitos.
Y de ahí a Chaouen, pueblo amable de color azul, calles estrechas, escaleras inesperadas, su color ya causa impresión, azul, acorde con el color que nos identifica en nuestro amado Motoclub. Ciudad tan fotogénica como la esperas.
Nace un nuevo día y seguimos nuestro camino a Fez, ciudad imperial cuya medina es el mayor laberinto del mundo y la más autentica, sólo apta para quienes disfruten perdiéndose en esa red de calles y callejones que no terminan en ninguna parte, con bazares y puertas que guardan auténticos palacetes y lujosos Riads en los que sólo falta Aladino con su lámpara maravillosa. Y qué decir de los curtidores de pieles, indescriptible la experiencia, una ramita de menta ayuda a las fosas nasales a mantener la forma … jejejejejeje
Si hay que elegir una de cuantas ciudades increíbles posee Marruecos ninguna duda de que nos quedaríamos con Fez. Y es que hay lugares en los que la mayor suerte consiste en perderse…
Seguimos en este maravilloso viaje, con destino Merzouga y sus dunas, pero durante el trayecto pasamos por uno de los lugares que pocos turistas conocen en Marruecos, Ifrane “La pequeña Suiza” en la montañas del Atlas Medio, con una naturaleza exuberante y anchas avenidas, ciudad diferente y única en Marruecos. Nuestro camino nos lleva a los famosos bosques de Cedros Gigantes y nos topamos con su colonia de monos en libertad… impactante! Y después el Valle del Ziz y su palmeral….
Y por fin… el desierto, esa llegada a Merzouga en el desierto del Sahara la gran puerta a Erg Chebbi, enorme expansión de dunas de arena. Excursión en camello para ver el maravilloso atardecer en las dunas doradas y descansar en las Jaimas. El despertar fue sencillamente inolvidable, esa primera luz del día en silencio, otro día limpio que vestía de naranja la vista hacia el infinito.
Lugar único donde tuvimos la oportunidad de conocer la cultura y tradición de los pueblos Bereberes.
No paran las sensaciones, nos dirigimos a conocer Ouarzazate (El Hollywood de África), de camino tenemos el privilegio de contemplar las suaves colinas de Todra y adentrarnos en sus profundas gargantas de paredes tan esbeltas que es imposible encontrar el cielo, y las gargantas del Dades que no desmerecen en belleza, insólitos parajes naturales. La visita a los estudios de cine muy interesante, y absolutamente inesperado de encontrar en esta ciudad del desierto, decorados naturales que la convierten en una etapa turística ideal y exótica.
Camino ya de Marrakech, la segunda ciudad imperial de Marruecos, nos preparamos para el ascenso al interminable puerto de montaña de Col de tizni-N-Tichka con sus 2260 metros de altitud y atravesar la cordillera del Atlas disfrutando de sus paisajes que se pierden más allá de la vista. En la famosa e inmensa plaza de Jemaa El Fna, corazón de la Medina de Marrakech podrás encontrar cualquier cosa, y cuando decimos cualquier cosa es que lo es!!
Llegar a Essaouira, después de tanta lucha, después de tanto regateo y rutas fue un alivio. Por fin el mar. Por fin esa sensación de libertad, de amplitud, de esperanza que da el océano a cualquier ciudad. Por fin la arena, la sal, el viento, las gaviotas, los pescadores, los barquitos, las olas, los atardeceres, el agua … el mar.
En este viaje comprendimos que hay dos lugares que curan el alma: el desierto y el mar.
Casablanca, Rabat y Asilah, también en nuestro destino.
El ferry espera, el Estrecho, Tarifa… parada en Málaga… de nuevo Madrid.
La imaginación sigue su curso, todo ha parecido un sueño… pero no lo fue, porque MOTOSALIDOS LO VIVIÓ!!!!!!!!
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